(Viene de la entrada anterior)
Tras el desembarco en Normandía, para abastecer a las tropas en combate y mantenerlas operativas, los aliados tendieron un oleoducto submarino que enlazó a los petroleros aliados con las costas francesas y dos puertos artificiales, formados por enormes diques (uno en Omaha y otro en Arromanches). Estuvieron plenamente operativos pocos dias después del desembarco. Pero una tremenda tormenta que se desató el día 18 de junio, los dejó completamente desmantelados. Hoy en día, en Arromanches, todavía se pueden contemplar los restos del malogrado "Puente Winston", que dan una idea del tremendo temporal que azotó las recién liberadas costas francesas.
(Continuará)
Textos y fotos: Vicente Escudero
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