Historia a tres, con maniquí, artilugio bicicletero y fotógrafo por medio.
Siempre he pensado que en un espacio concreto se pueden sacar diversas fotografías. Muy distintas, unas a otras. Ultimamente pienso que las fotos "están ahí" y que sólo piden que las tomemos. Las instantaneas pueden formar secuencias. Y -al contrario de lo que pasa en las matemáticas, el orden de los factores, sí altera el producto. Si en una secuencia fotografica cambiamos el orden de los factores (las instantaneas), la historia que contaremos será diferente. Aquí está una prueba: las fotos que publico a continuación están en riguroso orden según las tomé. Si las intercambiais entre ellas (como si se tratasen de las "cartas" de una baraja) podeis contar diferentes historias. Al final, lo más importante, creo yo, como fotógrafo y como persona, es... ser honesto.
Todas las fotos: Vicente Escudero
No hay comentarios:
Publicar un comentario