Sí, es una edición conmemorativa de sólo 2.000 botellas para todo el mundo.
Es el champán ("Champagne", si somos puristas) que se bebía en el Titanic, antes de su hundimiento.
Bien, ¿qué os voy a decir?...
Antes de que realmente suene la Hora veinticinco. (¿Quizás estamos a punto?),
Antes de que suenen las "Campanadas a media noche",
Antes que las "Campanas doblen por tí", o por todos nosotros,
Antes de que el mundo se acabe,
Antes de todos los "antes",
Lo mejor, si puedes conseguir una botella, bébetela, en buena compañía, y guarda la chapa como recuerdo.
Los recuerdos, los buenos recuerdos, son los que jamás mueren.
Carpe Diem y... ¡No podrán con nosotros!
Fotos: Vicente Escudero.
No hay comentarios:
Publicar un comentario