"A las aladas sombras del almendro en flor te requiero, que tenemos que hablar de muchas cosas, compañero del alma, compañero".
Las siguientes entradas de este blog piden una aclaración.
Lo bueno de algunos deseos es que, a veces, se cumplen.
Siempre quise hacer este reportaje. Rememorar fotográficamente los caminos del exilio de los republicanos españoles. Visitar -y honrar- la tumba de Antonio Machado, en Collioure.
Ahora he podido cumplir esta deuda con el pasado. Parte de mi familia fueron algunas de esas personas que tuvieron que atravesar los Pirineos huyendo de las tropas sublevadas y "victoriosas" de Franco.
Bien, aquí estoy. Rememorando. No se trata de rencor ni de rencillas. Pero se trata -todo hay que decirlo- de una justa "memoria histórica". Porque, ya se sabe, "Españoles, perdonad, pero no olvideis". O si lo quereis de otra forma, "los pueblos que olvidan su historia, están condenados a repetirla". Que no sea así, que -por favor- se equivoque Machado y que no se cumpla su profecía ("Españolito que vienes al mundo, te guarde Dios. Una de las dos Españas ha de helarte el corazón").
Este reportaje lo he dividido en cuatro partes, siguiendo las pautas que marcaban el propio itinerario geográfico del exilio republicano: Portbou, de Portbou al collado de Belitres, de Belitres a Cerbere (Francia) y tumba de Antonio Machado, en Colliure, el final del camino.
Por supuesto, este reportaje es un sentido recuerdo y homenaje a mis abuelos, Vicente y Carmen; a mi padre, Vicente; y a mi "tia-mami", Esther. ¡Viva la República!, ¡Vivan los sueños que tuvieron de un mundo mejor!
Gracias, también a M. que, con su sentimiento, y lealtad, lo ha hecho posible.
(Foto: MAFALDA56)
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